En un mundo académico donde aún persisten los trajes oscuros, las corbatas y los protocolos, Serena Caeli (oriunda de Luque, Paraguay) eligió brillar con luz propia. Literalmente. Con el icónico uniforme de marinera, guantes, botas altas y su birrete bien puesto, se presentó a defender su tesis… vestida como Sailor Moon.
Lo que para algunos puede parecer una excentricidad, para Serena fue un acto de amor propio, valentía y coherencia: su investigación se centra en un espacio gastronómico temático enfocado en la cultura anime, geek, gamer y cinéfila. Su look no solo era una declaración de estilo, sino parte integral del concepto de su proyecto. Y sí: la universidad lo aprobó. Es más, al rector le encantó.
“Solo vivimos una vida”
Así lo resumió ella en redes sociales, donde compartió las imágenes del momento que ahora se volvió viral. Bajo la foto escribió:
“Yo quería ser diferente y defendí mi tesis como Sailor Moon, porque solo vivimos una vida. Siempre me molestaron por ser otaku, friki, geek… y miren: así me volví licenciada.”
El gesto no solo conmovió a sus seguidores, sino que se transformó en un símbolo de resistencia cotidiana. En su publicación, Serena también animó a otros a abrazar su autenticidad sin vergüenza:
“No cambien sus gustos ni su forma de ser para encajar. Elijan ser felices.”
Una tesis con alma de fandom
Lejos de ser un simple disfraz, su elección estética estaba directamente conectada con el enfoque de su tesis: turismo gastronómico temático para fanáticos de la cultura pop. Una propuesta que integra la pasión por el anime y los videojuegos con la hospitalidad y el entretenimiento, pensada para construir experiencias únicas en restaurantes y cafés ambientados.
La escena podría parecer sacada de un manga: Serena de pie, con su traje azul y blanco, frente al jurado. Pero no era ficción: era una estudiante diciendo, sin palabras, que sus pasiones también merecen estar en las aulas.
La comunidad reaccionó con emoción
No faltaron los mensajes de apoyo, cariño y agradecimiento. Algunos le escribieron:
“Esto me da esperanzas para ir vampírico”,“Sos una inspiración”,“Me diste ganas de hacer mi defensa con un outfit especial”.
Serena no solo defendió una tesis. Defendió la idea de que el mundo académico también puede ser un espacio para lo lúdico, lo creativo y lo auténtico. Y, como buena Sailor Scout, lo hizo con estilo, orgullo y una sonrisa.
Fuente Diario Extra
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