Kimba el León Blanco celebra 60 años con moneda de oro


En la selva de la memoria colectiva, donde un león blanco soñaba con un mundo sin cadenas, Kimba el León Blanco —conocido en Japón como Jungle Emperor— sigue rugiendo con fuerza. Para quienes crecieron con sus aventuras de coraje y armonía entre humanos y animales, este 60 aniversario de su emisión animada trae un tributo que brilla como el sol africano: una moneda conmemorativa de oro puro, limitada a 500 piezas, que captura la esencia de una serie que marcó el inicio de la animación a color en televisión.

Un legado dorado para un pionero animado

Lanzada como la primera serie animada a color para TV en Japón desde 1965, basada en el manga de Osamu Tezuka, Jungle Emperor —o Kimba el León Blanco en Latinoamérica— sigue a Leo, el cachorro blanco que hereda el sueño de su padre Panja de unir la jungla y la civilización. Esta moneda, emitida por las Islas Cook como moneda legal, presenta en full color a Leo junto a Panja, Laia y Coco, acompañados del logo del 60 aniversario. En el reverso, el retrato oficial de Carlos III como jefe de Estado, con certificado de autenticidad incluido.





Disponible en PREMICO Online Shop por 549.780 yenes (aproximadamente 3.600 dólares, dependiendo del cambio), cada pieza llega en un estuche de exhibición con el logo conmemorativo, un detalle que transforma este oro en un tesoro para coleccionistas que atesoran no solo el metal, sino las lecciones de paz y valentía que Leo dejó en generaciones.

En Latinoamérica, donde la serie se conoció como Kimba el León Blanco y se emitió en canales abiertos durante décadas, este lanzamiento evoca tardes de infancia frente a la pantalla, con un héroe que enseñaba empatía en un mundo dividido. Aunque la tienda PREMICO envía internacionalmente con costos adicionales, plataformas como eBay o sitios de numismática podrían ofrecer opciones para fans regionales, aunque la edición limitada eleva su exclusividad.

En tiempos donde los clásicos resurgen en remakes digitales, esta moneda de oro puro es un recordatorio tangible: las historias de Tezuka no envejecen, solo se pulen con el tiempo. Si Leo te acompañó en tus primeros sueños de justicia, esta pieza podría ser el rugido perfecto para tu colección.

Fuente: Comic Natalie

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